La sostenibilidad como ventaja competitiva para el sector textil colombiano
- María José Romero
- 28 may
- 2 Min. de lectura
Mayo 27 de 2025
Gracias a Araújo Ibarra Consultores en Negocios Internacionales y a TxGr Partners, tuvimos el honor de participar el 26 de mayo en el webinar “Internacionalización Sostenible del Sector Textil”. Desde Rights Lab, compartimos algunas ideas sobre cómo la sostenibilidad puede convertirse en una propuesta de valor competitiva para las empresas del sector, tanto a nivel nacional como internacional.
Este primer blog tiene la intención de entender la sostenibilidad empresarial en el mundo textil colombiano como un requisito de mercado y sobre todo, como una estrategia clave para la competitividad global.
Según la OCDE, América Latina y el Caribe concentran actividades que abarcan toda la cadena de valor del sector textil: desde la producción de fibras hasta la manufactura. La región es además un actor clave en la producción de algodón y cuero a nivel mundial. Ese posicionamiento implica también una gran responsabilidad, y una enorme oportunidad.
Comparto aquí cuatro razones por las cuales la sostenibilidad se consolida como una ventaja estratégica para el sector:
1. Acceso a mercados internacionales exigentes. Regulaciones como la Directiva de Reportes de Sostenibilidad Corporativa (CSRD), la Directiva sobre Afirmaciones Ambientales relacionada con estrategias de mitigación en el mercado europeo del greenwashing y el Reglamento de Ecodiseño de la Unión Europea establecen condiciones claras: trazabilidad, circularidad, reducción de impacto ambiental y transparencia en toda la cadena de suministro. Los pasaportes digitales de producto (DPPs), por ejemplo, comienzan a exigir que las marcas compartan esta información de forma accesible para el consumidor. No se trata solo de cumplimiento normativo, sino de competitividad real.
2. Procesos de compra responsable. La mayoría de las marcas globales integran criterios ESG en sus matrices de selección de proveedores. Contar con políticas de sostenibilidad, derechos humanos, DEI, ética corporativa y reportes verificables ya es parte del checklist para participar en licitaciones o formar parte de cadenas de abastecimiento globales. La sostenibilidad se traduce así en una mejora concreta del puntaje competitivo frente a otras empresas.
3. Relación con comunidades y aliados. La sostenibilidad también se convierte en un canal de fortalecimiento del vínculo con comunidades, grupos de interés y proveedores. Iniciativas como Obras por Impuestos, COCREA o alianzas público-privadas permiten transformar los compromisos sociales en acciones verificables. Además, representan oportunidades para apalancar beneficios tributarios y reputacionales.
4. Narrativa de marca con propósito. Finalmente, avanzar en sostenibilidad permite construir una narrativa coherente y creíble. Certificaciones como OEKO-TEX, B Corp o Fair Trade abren puertas en mercados más conscientes y permiten comunicar una historia sólida basada en evidencia, no en marketing. Lo relevante no es el sello, sino la historia que lo respalda.
Este fue nuestro punto de partida. En la próxima publicación hablaremos sobre los desafíos reales del sector para avanzar en esta transición: desde los costos, la desarticulación institucional, hasta el desconocimiento de buenas prácticas para abordar los principales riesgos del sector. Finalmente exploraremos cómo empezar, con herramientas prácticas y casos concretos desde Rights Lab.
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